Aunque no sean muy conocidos, muchos de nuestros electrodomésticos los incorporan: teléfonos, ordenadores, aparatos de cocina. También los podemos encontrar en aplicaciones médicas, maquinaria y automoción. De hecho, casi todos los aparatos que se activan con la presión de un dedo utilizan estos dispositivos. Se utilizan para introducir órdenes en los aparatos que dejan de estar activas una vez que se retira la presión sobre ellos.
Hoy día los interruptores de membrana se fabrican en todo el mundo y se utilizan a diario. Son únicos porque el proceso de fabricación necesita integrar tanto la impresión del circuito como la del gráfico de la placa.
El material habitual sobre el que se suele imprimir es PET de uso industrial (poliéster) y se utiliza tanto en la impresión de circuitos sueltos como en la de los interruptores de membrana completos. Cuando se desea utilizar un producto de menor coste para aplicaciones menos exigentes, se utiliza el policarbonato en la impresión de los gráficos de las placas. Los interruptores de membrana se suelen imprimir en el reverso y en la parte interior del film que recubre el dispositivo.
Métodos de impresión
Después de que se han aplicado las diferentes capas de tinta que componen el circuito impreso, se ensambla el interruptor y los componentes físicos se conectan para conseguir el producto final que puede contener circuitos gráficos y electrónicos impresos.
Hasta ahora, el método escogido de impresión era la serigrafía porque permitía garantizar la exactitud de impresión durante el proceso y la posibilidad de manejar materiales frágiles. Este método, sin embargo, ha ido cambiando ya que muchos fabricantes han descubierto en las soluciones digitales un método más rápido y barato que además, les ofrece nuevas posibilidades. La impresión plana se ha impuesto como tecnología preferida ya que las diferentes capas se imprimen una encima de otra, con lo que se consigue un grosor preciso y repetible en otras piezas. Para este método resulta crítico que el soporte quede fijado en una posición y no se mueva. La impresión híbrida o flexible mueve el soporte durante la impresión y no es capaz de ofrecer la exactitud de impresión necesaria.
Steven Badger, responsable de producto de la gama Océ Arizona, afirma que las comparativas de costes realizadas en Europa muestran que los interruptores de membrana impresos en esta gama de impresoras planas se producen hasta un 40% más rápidamente que con los métodos de serigrafía tradicionales y además, un 16% más barato.
“Océ comenzó a investigar los procesos de impresión MSO (Membrane Switch Overlay) tras recibir varias consultas de proveedores de MSO en Europa. Ante las oportunidades de mercado que se abren, Océ procedió a realizar dichas pruebas con su impresora plana Océ Arizona UV”, añade Badger.
“Como la impresora utiliza un sistema de vacío que fija el soporte a la mesa durante el proceso de impresión, al principio resultó difícil conseguirlo. Los materiales eran tan finos que se deformaban con la fuerza ejercida por dicho sistema de vacío, que había sido diseñado para soportes más resistentes como cartón-pluma o poliestirenos. Durante las siguientes pruebas, se consiguió que estas delgadas membranas quedaran absolutamente fijas en la mesa permitiendo una impresión increíblemente exacta que facilitó la consecución del proceso”.
Océ Arizona, la solución perfecta para entornos de baja y media producción
La gama de impresoras Océ Arizona ha sido especialmente diseñada para entornos de producción bajos y medios. Es capaz de imprimir digitalmente capas para hasta 50.000 interruptores de membrana. Aunque este volumen puede resultar insuficiente para algunas aplicaciones industriales, una combinación en el uso de la serigrafía y la impresión digital puede producir más de un millón de interruptores consiguiendo así, una solución tremendamente productiva y ajustada en costes.
Steven Badger afirma que “utilizar tecnología digital para la impresión de pequeñas y medianas tiradas no sólo reduce los costes y agiliza la producción, también permite realizar prototipos de forma rápida y sencilla. Así, la impresión digital cubre una serie de necesidades del sector industrial que necesitaban poder utilizar más colores, gradiente o incluso, la utilización de imágenes, logotipos o fotografías durante el proceso de impresión”.
Y concluye, “además todo el proceso de impresión se realiza de forma desatendida, liberando a los operadores para realizar otras tareas y esta tecnología también reduce el impacto medioambiental frente a la serigrafía. Las tintas utilizadas durante la producción de estos interruptores son Océ IJC256, que proporcionan una excelente adherencia al soporte y cumplen con las normas ASTM F1842-20. Océ ya dispone de cerca de una docena de clientes que imprimen MSO”.
Ver vídeo sobre la impresión de interruptores de membrana con Océ Arizona.